Presidentes
Antonio Scaramusso (1908-1912 y 1915 y 1919):
Con tan solo 15 años de edad fue el primer presidente de San Lorenzo. Comenzó a dirigir la institución en 1908 tras la fundación del mismo, hasta 1911. Por diversas cuestiones, el Club no funcionó en 1912 y 13, pero ya fines del año siguiente, hasta 1919, Scaramusso volvió a gobernar San Lorenzo. Ahí le tocó luchar tesonera y ardorosamente para salvar los primeros tramos de un camino lleno de obstáculos.
En esta gestión, San Lorenzo pudo construir el Gasómetro en avenida La Plata, inaugurado en 1916 frente a Estudiantes de La Plata. Por varios años, ese estadio, sería el que contraería los espectáculos deportivos más importantes del país.
Necesitó apelar a su inteligencia para que San Lorenzo conquistara el arraigo que tuvo la institución en las primeras décadas de vida. Scaramusso fue un verdadero líder para aquellos forzosos. Con gran capacidad logró dirigir fehacientemente los años románticos del inicio de una pasión llamada Club Atlético San Lorenzo de Almagro.
José Gorena (1914-1915):
Fue partícipe del famoso equipo “Los Forzosos de Almagro” y el primer mandatario luego de la disolución provisoria del Club entre 1912 y 13. Tuvo la difícil misión de reorganizar las bases de la institución en tan sólo seis meses, dejándole nuevamente, en 1915, el mandato a Antonio Scaramusso.
Eduardo Larrandart (1920-1928):
Llegó en los inicios de la década del 20, época que será muy satisfactoria para el fútbol de San Lorenzo. Durante su gestión, el Club de Boedo obtuvo los campeonatos de 1923, 24 y 27, siendo el equipo azulgrana en este último año el conquistador de un record hasta hoy imbatido: 47 partidos invicto. Ese fue el primer torneo que se disputó con las dos ligas unificadas, donde el campeonato contó con 34 participantes.
A su vez, San Lorenzo fue subcampeón en el 25 y 26, mientras que en el 29 logró alcanzar el tercer puesto en la tabla de posiciones.
Además, las vitrinas les abren la puerta a los dos primeros títulos internacionales: Copa Río de la Plata, obtenida en 1924 y 28. Este trofeo era disputado por el campeón del fútbol uruguayo (en aquel entonces bicampeón olímpico y en vísperas de lograr el primer mundial de fútbol en 1930) con su par argentino.
Pedro Bidegain (1929-1930):
Primero se desempeñó como vicepresidente durante diez años, entre 1918 y 1928. Cuando asumió la presidencia en 1929, la institución tenía 3.612 socios y, en menos de dos años el club pasó a tener 13.638 asociados, es decir, que Bidegain cuadruplicó la cantidad de afiliados en su corta gestión, caso único en la historia de San Lorenzo.
Fue él quien amplió el Gasómetro de avenida La Plata, transformó el templo y ya e 1929 se eligió a este estadio donde para que la Selección Argentina dispute sus compromisos. En su gestión, se iniciaron las prácticas del tenis y básquetbol.
En su condición de diputado nacional ligado al radicalismo, fue gran responsable de que nuestro rival de barrio perdiera su campo de deportes (cancha de fútbol) ubicada en el cruce de las calles Chiclana y Pirovano, acción que le permitió a San Lorenzo cosechar muchos más adeptos en esa zona.
Conjuntamente con su vicepresidente Pedro Villemur, tenían un proyecto para realizar el estadio de cemento en avenida La Plata, previsto para 1931 o 1932. Desafortunadamente con el golpe militar del 6 de septiembre de 1930 que derroca al presidente Hipólito Irigoyen, ocasionó que Pedro Bidegain, siendo presidente de San Lorenzo, fuera encarcelado en la fría e inhóspita cárcel de Ushuaia en condición de preso político, perdiendo la institución la primera oportunidad de hacer de cemento el querido Gasómetro.
Falleció en 1933, con tan solo 46 años, teniendo mucho más potencial para dar. Hoy un pasaje en Boedo lleva su nombre.
Alfredo Bonnani (1932):
Interino tras la partida de Eduardo Larrandart a la presidencia de la Liga Argentina de Fútbol. Durante su administración le dio un fuerte apoyo a los incipientes deportes federados, como el ajedrez, tenis y básquetbol. También, durante su gestión, se abonó el último vencimiento de los terrenos de avenida La Plata a María Constancia Onetto. Su gestión apoyó considerablemente a las divisiones inferiores.
Fue el presidente del primer San Lorenzo campeón en la era profesional. Le dio más importancia al aspecto deportivo por sobre el cultural. Bajo su gestión se construyó un local para cobradores del club, se techó la entrada de socios y se hicieron grandes reformas en locales destinados a la Presidencia, Secretaría y Tesorería. En el plano futbolístico, contrató a Petronilho do Britos, entre otros futbolistas brasileños.
En su período se adquirió un terreno en la avenida Riestra. Fue tesorera en la gestión de Bonnani y en la de Tomás Molina. Durante su mandato se organizó el primer torneo de verano nocturno en la Capital Federal, que se disputó en el Gasómetro. Con Lazzari como presidente, San Lorenzo fue el mejor equipo de 1936, ganando la Copa de Honor, pero no logró ser campeón del año por errores de la Subcomisión de Fútbol, encabezada por Juan Carlos Scala.
Durante su gestión se compró un terreno ubicado en avenida Rivadavia y Yatay. Además se demolió la histórica tribuna techada y se llevó adelante la ampliación de la misma. Se dotó a los frontones de pelota paleta de iluminación. Se construyó la pista de atletismo circundante al estadio de fútbol.
Fue presidente entre 1939 y 1945, y algunos núcleos del Club decían que no ganaba campeonatos de fútbol, pero con Pinto San Lorenzo fue la institución con más socios de la Argentina con 33.489 (6.000 más que River que estaba segundo), duplicando al resto de los grandes.
Bajo su conducción se realizaron grandes obras en la institución: la pileta de natación, que según las crónicas de la época era la mejor de Sudamérica, canchas de pelota paleta, polígono de tiro, gimnasio de boxeo y pesas, entre otras. En San Lorenzo se podía practicar todo tipo de actividad deportiva.
Fue Enrique Pinto quien contrató a René Pontoni y Rinaldo Martino, pero además San Lorenzo cosechaba socios por su movida cultura. Se creó la biblioteca que contenía 11.000 libros, se desarrollaron cursos de dibujo, corte y confección, danzas clásicas y música.
El Club era un lugar de encuentro para la comunidad, ya que con Pinto, los carnavales de la institución eran los de mayor concentración de público.
Por su parte, en 1941 y 42, la hinchada de San Lorenzo llenaba las canchas, siendo en esos dos años, a pesar de no haber obtenido ningún título, primero en la tabla de recaudaciones.
En esa década, San Lorenzo era campeón en básquetbol, atletismo, levantamientos de pesas, pelota paleta, entre otros.
En su corta gestión de un año, San Lorenzo conquistó el título de 1946 en forma brillante, donde se consagró aquel trío de oro: Farro, Pontoni y Martino. Peluffo hizo el camino de cemento en la entrada de la tribuna oficial para facilitar el acceso del público del Gasómetro. Además, realizó la vereda de mosaicos al costado norte de la pileta de natación. Construyó la cancha de bolos celtas.
Le dio mucha importancia a los departamentos culturales. Con motivo de la ampliación de plateas altas, se colocaron rejas de hierro y el alambrado posterior a las plateas bajas. Se renovó la iluminación de la cancha de básquetbol y bochas. Además se inauguró un buffet con kiosco. Nardelli contrata a Ángel Peruca, el futbolista más caro del mercado.
Se edificio el gimnasio General San Martín y el hall de la entrada sobre Inclan al 4300. Durante este mandato San Lorenzo realizó otra gira por España, donde le ganó al Barcelona, entre otros. El 27 de diciembre finalmente fue inaugurado el gimnasio San Martín y se hizo la pintura del gran cuadro mural, obra del maestro argentino Juan Carlos Lamela. La obra se denominó “La carga de los granaderos del General San Martín en el combate de San Lorenzo”.
Tuvo dos mandatos. Le dio mucha consideración al área cultural de la institución. Se renovó el stand de tiro. Prometió el estadio olímpico para 150.000 personas en avenida La Plata y se analició la posibilidad de construir el “Palacio San Lorenzo” sobre la avenida Rivadavia. Nada de ello ocurrió.
Con este presidente se realizaron boleterías sobre avenida La Plata. Además, se inauguró, por la calle Las Casas, las famosas plateas “Boda de Oro”, con 1.500 butacas. También se construyó un palco de hierro y madera para orquestas de transmisiones. En esta etapa se conmemoraron los cincuenta años de vida del club.
San Lorenzo logra el título del 59, donde sobresalió la figura del goleador José Francisco Sanfilippo. Se iniciaron las gestiones para solicitarle a la Municipalidad los terrenos del Parque Almirante Brown (hoy Ciudad Deportiva). Se construyó en el salón San Martín una concentración para los futbolistas profesionales. Además, se reforzó la tribuna chica sobre la calle Muñiz.
Logró que la Municipalidad extienda de 25 a 99 años la cesión de 27 hectáreas del Parque Almirante Brown. En 1961 se contrató a Juan Carlos “Toto” Lorenzo, quien llegaba de Europa y, en ese año, logró el subcampeonato.
Prometió no transferir al ídolo Sanfilippo pero finalmente lo vendió apenas asumió. Durante este período se propuso el anteproyecto de construir un estadio en el Parque Almirante Brown para 150.000 espectadores. Se hizo el cerramiento interior de las plateas “Bodas de Oro”. Construyó un local para el salón de ajedrez y, en 1964, en el palco de periodistas, se le puso el nombre de “Felix Fráscara”.
En esta gestión San Lorenzo se consagró como primer campeón invicto del fútbol argentino, más precisamente en 1968, con los famosos “Matadores”.
Durante su gestión, más precisamente en 1969, se gestó el juicio con la empresa Ernesto Altgelt y Cia S.R.L. (por el encargo de parte de la institución para la construcción de unas piletas de natación en la Ciudad Deportiva) que terminaría siendo 13 años después el factor principal de la pérdida del Gasómetro de Avenida La Plata.
Durante su gestión se hicieron algunas construcciones en el estadio, como sanitarios nuevos, construcción de escaleras en el Palco Bidegain, y la ampliación de pasillos en los sectores de plateas altas.
Se llevó los pasillos de los sectores Lazzari, Bodas de Oro y Urso de 1,10 metro a 1,60 metro. También se construyeron nuevos portones para el salón del Gimnasio General San Martín.
Bajo su gestión se lograron tres títulos, el bicampeonato de 1972 y el Nacional de 1974. Además las distintas disciplinas federadas siguieron en lo más alto de cada federación, ejemplos del básquetbol, natación, hockey sobre patines y atletismo.
Sin embargo hacia el 75 se desmantelaron casi dos equipos para reemplazarlos por valores de poca valía que iniciaron un proceso decadente en la institución.
Durante este ejercicio se intentó arreglar con nuestro adversario barrial para compartir el estadio Tomás A. Ducó y de esta manera cerrar el Gasómetro de Avenida La Plata.
En lo estrictamente futbolístico esta conducción fue muy mala. Se intentó reordenar las muy desordenadas cuentas heredadas de la gestión anterior. Se invirtió en la Ciudad Deportiva, con el dinero recibido con la venta de Héctor Scotta se construyeron los pilotes de la actual platea Norte del estadio Pedro Bidegain.
Las fracciones políticas se unieron y consagraron presidente de San Lorenzo a un empresario exitoso: Moisés Annan.
Bajo su mandato se vendieron los estratégicos terrenos de avenida Rivadavia y el de Yatay y Rivadavia, consiguiendo escriturar el espacio que hoy ocupa la Ciudad Deportiva para que sean propiedad de San Lorenzo.
Durante su mandato se llevó adelante la Asamblea que autorizó a la venta de todos los inmuebles ubicados en Avenida La Plata al 1700 (agosto de 1978).
La debacle institucional, sumada a las vergonzosas incorporaciones en el rubro fútbol y situaciones poco claras externas a nuestra institución, llevaron a San Lorenzo a perder la categoría.
La lamentable situación de San Lorenzo llevó a las distintas fracciones a sellar una unidad de cúpulas que consagraron a Héctor Habib como presidente de la “unidad”. Durante su gestión se consiguió el ascenso a primera división. En su mandato se vendió el Gasómetro de avenida La Plata.
De corta gestión, pero a su vez de pésima administración. El Club estaba endeudado, con contratos incumplidos, al borde de desaparecer, según decían. Era la época que los jugadores se bañaban con agua mineral y prácticamente no tenían ropa para jugar.
Comenzó saneando paulatinamente los problemas administrativos de la institución, arreglando también todo tipo de contratos. Si bien prometió la construcción del estadio en las elecciones, le ganó a la fórmula Savino-Guil por escasos votos. Finalmente, en 1993, se inauguró el Pedro Bidegain con capacidad para 40.000 espectadores.
En el plano deportivo, el Club sólo tuvo dos títulos en fútbol, el Clausura de 1995 y 2001. En su último año de gobierno, alcanzó la final de la Copa MERCOSUR, pero la conquista no se iba a dar durante su mandato.
Si bien tuvo una primera parte destacable, descuidó profundamente la actividad social y cultural de San Lorenzo desde fines de los noventa, a tal punto que, en medio de una crisis financiera, intentó ceder los derechos de imagen del Club a la firma suiza ISL, quien luego quebró.
Cuando asumió Alberto Guil en 2001, Miele fue expulsado como socio de San Lorenzo de Almagro.
Lo más destacado de su gestión fue la convocatoria de acreedores que realizó ni bien asumió, lo que produjo, junto a la devaluación y su respectiva pesificación en aquel entonces de la Argentina, que el pasivo se reduzca considerablemente.
Futbolísticamente, en su período, San Lorenzo logró la Copa MERCOSUR (sólo estuvo en la segunda final), y la Sudamericana, en 2002 ambas. No fue un presidente que haya mostrado mucho interés por dirigir al Club; es más, intentó renunciar apenas asumió.
A su vez, en una entrevista radial, Guil declaró que la zona donde está el estadio de San Lorenzo es “inhóspita” y, además, consultó en Comisión Directiva la alternativa de que el Club sea local en Ferro o Vélez nuevamente.
Rafael Savino (2004-2010):
Asumió la presidencia con sólo 2074 votos, en una elección que tuvo a cinco listas participantes. Desde que ocupó el cargo, se cometieron muchos errores en el plano futbolístico, como la contratación de varios jugadores por una suma considerable de dinero que luego no se recuperó.
Participó en la Copa Libertadores de 2005 y de 32 equipos participantes, San Lorenzo terminó en la última colocación. Además, se realizaron malas campañas, a tal punto que el Ciclón recibió goleadas históricas, generándose record negativos.
En lo institucional, se puede decir que San Lorenzo consiguio un terreno de 4.500 metros cuadrados en pleno Boedo, donde yacía el Gasómetro. Vale destacar que la gestión no es directa del presidente, sino de distintos órganos activos de la institución.
Realizó obras en el Estadio después de varios años: se creó un semipiso en la Platea Sur y se levantó el semicodo que extiende la cabecera local.
Con respecto a lo deportivo, bajo su gestión se conquistó el Torneo Clausura 2007, luego de seis años sin títulos locales.
Al terminar su mandaro dejo una deuda aprox de 100 millones de pesos.
Gano las elecciones con casi 3.000 votos y ganando en votos sobre un total de casi 8200.
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